Recientemente, China y Estados Unidos han acordado reducir la tensión en su creciente guerra comercial, marcando un final precario a meses de intercambios de medidas entre estas potencias económicas y tecnológicas. Este alivio se logró en la reunión entre los presidentes Donald Trump y Xi Jinping en Corea del Sur, lo que inicia una nueva fase en un enfrentamiento que comenzó en 2018.
Principales cuestiones y su estado actual
Aranceles
Durante su primer mandato, Trump implementó aranceles sobre productos chinos, denunciando el robo de propiedad intelectual y otras prácticas comerciales consideradas « injustas ». Su sucesor, Joe Biden, mantuvo y amplió estas tarifas, especialmente en sectores tecnológicos estratégicos como los vehículos eléctricos y los semiconductores.
En la reciente reunión con Xi, Trump acordó reducir las tarifas generales sobre todos los productos chinos en un 10% a partir del 10 de noviembre y conceder exenciones anuales para ciertos artículos. Por su parte, China prometió ajustar sus propios aranceles sobre bienes estadounidenses. Esto lleva las tarifas estadounidenses sobre productos chinos a un promedio de aproximadamente el 45%, lo que sigue siendo un obstáculo significativo para el comercio entre las dos economías más grandes del mundo.
Fentanilo
China es la principal fuente de productos químicos precursoras usados para fabricar fentanilo, un potente opioide que alimenta una epidemia mortal en Estados Unidos. Aunque Pekín asegura que está combatiendo los envíos ilegales, los flujos de estos productos hacia Estados Unidos, especialmente a través de México, continúan.
La reciente reducción del 10% en los aranceles estadounidenses, formalizada en una orden ejecutiva, representa una disminución de la penalización del 20% relacionada con el fentanilo impuesta por Trump desde marzo. Trump ha declarado que Xi le aseguró que China « trabajará arduamente para detener el flujo ».
Tierra raras
Los presidentes también alcanzaron un acuerdo tentativo para asegurar el suministro de tierras raras, esenciales para los sectores de defensa, automotriz y electrónica de consumo. La minería y el procesamiento de estas materias primas están dominados por China y su control más estricto sobre las exportaciones ha afectado las cadenas de suministro y detenido la producción en fábricas a nivel global.
Las medidas más amplias introducidas el mes pasado, que incluían restricciones en tecnologías relacionadas, provocaron la furia de Trump, quien amenazó con imponer aranceles del 100% sobre productos chinos. Sin embargo, esa decisión fue evitada. Tras la reunión, se anunció que China otorgará licencias de exportación para tierras raras, además de galio, germanio, antimonio y grafito.
El enfrentamiento sobre tierras raras ha motivado a Washington y a aliados como Japón y Australia a fortalecer la producción nacional, aunque los expertos advierten que llevará años reducir la dependencia de China.
Controles de exportación
Estados Unidos ha acordado suspender por un año la expansión de la « Lista de Entidades », impuesta por preocupaciones de seguridad nacional sobre empresas chinas. Sin embargo, el país ha ampliado otros controles de exportación en años recientes, especialmente en chips avanzados e infraestructura digital.
Los funcionarios estadounidenses siguen preocupados por el uso de tecnología americana por parte de empresas chinas a medida que la competencia se intensifica, una rivalidad que parece continuar en los próximos años.
Wendy Cutler, vicepresidenta del Asia Society Policy Institute, comentó que los resultados anunciados no abordan los problemas estructurales que están en la raíz de las tensiones económicas bilaterales.
Soya
Beijing ha respondido a los aranceles estadounidenses imponiendo cargas sobre productos agrícolas americanos, incluida la soja, un sector clave de apoyo político para Trump. Más de la mitad de las exportaciones estadounidenses de soja se destinaron a China el año pasado, pero Beijing interrumpió todos los pedidos a medida que profundizaba la disputa comercial.
La Casa Blanca anunció que China acordó comprar al menos 12 millones de toneladas métricas de soja americana en los últimos dos meses de 2025 y suspender los aranceles de represalia sobre varios productos agrícolas de EE.UU. Sin embargo, queda por ver si los agricultores estadounidenses podrán recuperar la participación de mercado perdida.
TikTok
Washington ha intentado trasladar las operaciones de TikTok en EE.UU. de su empresa matriz china ByteDance, citando preocupaciones de seguridad nacional. Recientemente, ambas partes acordaron un marco para que las operaciones de la popular aplicación de redes sociales sean transferidas a la propiedad estadounidense.
Tras la reunión entre Trump y Xi, el secretario del Tesoro estadounidense, Scott Bessent, afirmó que se espera que el acuerdo avance en las próximas semanas. Por su parte, el ministerio de comercio chino expresó su disposición a « trabajar con Estados Unidos para resolver adecuadamente » el tema de TikTok.
La reciente negociación entre estas dos potencias no solo muestra un intento de desescalada, sino que también revela cuán complejas y profundas son las interacciones comerciales y políticas entre ellas. Los próximos meses serán cruciales para observar si estos acuerdos se traducen en cambios significativos y duraderos.



