Un enviado del Kremlin ha propuesto la construcción de un túnel ferroviario entre Rusia y Estados Unidos bajo el estrecho de Bering, con el objetivo de unir ambos países y facilitar la exploración conjunta de recursos naturales. Esta iniciativa, propuesta por Kirill Dmitriev, presidente del Fondo de Inversiones Directas de Rusia (RDIF), podría costar unos 8 mil millones de dólares y se espera que sea financiada por Moscú y « socios internacionales ». La obra consistiría en un enlace ferroviario de 112 kilómetros que podría completarse en menos de ocho años.

Un proyecto que simboliza la unidad

Dmitriev presentó la idea tras una conversación telefónica entre el presidente ruso Vladimir Putin y su homólogo estadounidense Donald Trump, donde ambos acordaron reunirse en Budapest para discutir la guerra en Ucrania. El enviado ruso ha utilizado esta propuesta como parte de un esfuerzo por revitalizar las relaciones entre Estados Unidos y Rusia.

La empresa de Musk como contratista

El modelo de conexión entre ambos países ha sido una visión histórica, desde la propuesta de un ferrocarril Siberia-Alaska en 1904 hasta los planes de 2007. Dmitriev mencionó que el estrecho de Bering, que tiene una anchura mínima de 82 kilómetros, ha sido objeto de interés durante más de 150 años. Los pequeños islotes Diomede, uno perteneciente a Rusia y otro a Estados Unidos, se encuentran a solo 4 kilómetros de distancia.

Para llevar a cabo el túnel, Dmitriev sugirió que podría ser construido por The Boring Company, una empresa de perforación estadounidense dirigida por Elon Musk. En un mensaje dirigido a Musk, expresó: « Imaginemos conectar a Estados Unidos y Rusia, y a las Américas con Afro-Eurasia a través del Túnel Putin-Trump. Un enlace de 112 kilómetros que simbolice la unidad. Los costos tradicionales superan los 65 mil millones de dólares, pero la tecnología de @boringcompany podría reducirlo a menos de 8 mil millones. Construyamos un futuro juntos ».

Desafíos de infraestructura

A pesar de las ambiciosas cifras, el proyecto requeriría también una considerable inversión para mejorar la infraestructura en ambos lados del estrecho, donde las carreteras y ferrocarriles de Chukotka son escasos.

Dmitriev también recordó que durante la Guerra Fría se había sugerido construir un « Puente de la Paz Kennedy-Kruchov » sobre el estrecho, y compartió un boceto de esa era que ilustraba la ruta prevista. Afirmó que RDIF ya ha completado un puente ferroviario entre Rusia y China, por lo que ahora es el momento de conectar los continentes de manera inédita.

Con esta propuesta, se abre un nuevo capítulo en las relaciones entre Rusia y Estados Unidos, dejando la puerta abierta a futuras colaboraciones en un contexto de creciente tensión global.