Woods se une a un creciente número de productores de energía que instan a los legisladores europeos a revisar la Directiva de Diligencia Debida en Materia de Sostenibilidad Corporativa. Esta normativa exige a las empresas que operan en la UE identificar y gestionar los riesgos relacionados con los derechos humanos y el medio ambiente en sus cadenas de suministro.

Preocupaciones sobre la regulación excesiva

Durante una conversación con Reuters en el marco de la reunión ADIPEC en Abu Dhabi, Woods expresó su preocupación por la posibilidad de que la legislación impida el éxito de empresas en Europa. “Si no podemos prosperar aquí, y si intentan imponer esta legislación dañina en todas nuestras operaciones globales, se vuelve imposible permanecer”, declaró.

La Directiva tiene como objetivo otorgar a los inversores una mayor visibilidad sobre los riesgos a lo largo de la cadena de valor y responsabilizar a las empresas por cualquier daño, incluso en operaciones fuera de Europa. Woods argumenta que la ley obliga a grandes compañías como ExxonMobil a implementar planes de transición climática alineados con el objetivo del Acuerdo de París de limitar el calentamiento global a 1.5°C. Según él, esta exigencia es técnicamente inviable.

“Lo sorprendente es que esta regulación no solo se aplica a nuestras operaciones en Europa, sino que también se extiende a todas nuestras actividades en el mundo, independientemente de si tienen relación con Europa”, añadió. Woods enfatizó que ExxonMobil está activamente en contra de esta directiva, advirtiendo sobre las “consecuencias desastrosas” que podría acarrear si se adopta en su forma actual.

Desafíos para el sector energético

A pesar de que los legisladores europeos han escuchado las objeciones de los productores de energía, Woods señaló que no ha habido cambios significativos. “Si algo, lo único que se ha logrado es confundir más el lenguaje, aumentando la exposición al riesgo debido a la mayor interpretación posible”, comentó. El Parlamento Europeo acordó discutir cambios adicionales a la ley el mes pasado, con la intención de aprobar las modificaciones finales antes de que finalice el año.

“Hoy en día, la economía ya está sobre regulada y está sufriendo un proceso de desindustrialización que asfixia el crecimiento económico. Esta legislación solo agravará esa situación”, añadió.

Qatar respalda las objeciones

El principal productor de gas, Qatar, junto con Estados Unidos, instó el mes pasado a los líderes europeos a reconsiderar la ley, advirtiendo que representa una amenaza para el suministro de energía asequible y confiable. Durante su intervención en ADIPEC, el ministro de energía de Qatar reiteró que podrían detener el suministro de gas natural licuado (GNL) a Europa si la UE no modifica o cancela la legislación.

“No podemos alcanzar la neutralidad de carbono, y eso es solo uno de los requisitos, entre muchos otros”, señaló Saad al-Kaabi, también CEO de QatarEnergy. “Europa necesita entender que depende del gas de Qatar y de Estados Unidos, así como de otras regiones del mundo. Es crucial que lo tomen en serio”, agregó.

Desde la invasión de Ucrania en 2022, Qatar ha suministrado entre el 12% y el 14% del GNL a Europa. Sin embargo, compañías como ExxonMobil han demandado que la UE retire por completo esta política, argumentando que podría llevar a la salida de negocios del continente.

Detalles sobre el regreso a Irak

ExxonMobil firmó el mes pasado un acuerdo para ayudar a Irak a desarrollar el gigantesco campo petrolero de Majnoon y ampliar las exportaciones de petróleo, marcando el regreso del gigante energético al país tras dos años de ausencia. Woods expresó que aún queda mucho por negociar respecto a los parámetros finales del desarrollo, especialmente en lo que se refiere a la compensación que recibirá la empresa.

Se espera que se finalice un acuerdo de participación en las ganancias, que Woods indicó se alinea con las prácticas de la industria.

Este contexto subraya las tensiones entre la necesidad de regulaciones ambientales y los intereses económicos de las empresas. A medida que se desarrollen los acontecimientos, será crucial observar cómo se equilibran estos intereses en el futuro cercano.