Nissan, uno de los principales fabricantes de automóviles en Japón, está evaluando la posibilidad de recaudar más de un billón de yenes (aproximadamente 7 mil millones de dólares) a través de una combinación de deuda y ventas de activos. Según informes de Bloomberg, esta estrategia incluiría la obtención de un préstamo sindicado respaldado por el gobierno del Reino Unido.
Emisiones de valores convertibles y bonos
La automotriz planea emitir hasta 630 mil millones de yenes en valores convertibles y bonos, que abarcarán notas en dólares estadounidenses y euros de alto rendimiento. Además, Nissan está considerando un préstamo sindicado de mil millones de libras (1.35 mil millones de dólares) que contaría con el respaldo de UK Export Finance.
Desinversiones estratégicas
Entre las opciones de financiación, Nissan también está sopesando la venta de parte de sus participaciones en Renault, su socio histórico, así como en el fabricante de baterías AESC Group. También se están evaluando la venta de plantas ubicadas en Sudáfrica y México.
Decisiones aún pendientes
Fuentes cercanas a Nissan han señalado que la junta directiva aún no ha aprobado este plan de financiación, lo que deja en el aire su implementación. Este plan también contempla la reestructuración de ciertas deudas existentes. Recientemente, la empresa presentó un ambicioso plan de reducción de costos que incluye la eliminación de alrededor del 15% de su plantilla y la reducción del número de plantas de automóviles de 17 a 10 a nivel mundial.
Posibles cierres de plantas
Informes de Reuters indican que Nissan está considerando cerrar dos plantas de ensamblaje, tanto en Japón como en el extranjero, así como detener la producción en Sudáfrica como parte de su estrategia de ahorro.
Reacción del mercado
Tras conocerse estos planes, las acciones de Nissan experimentaron un aumento de más del 4%, aunque posteriormente se corrigieron, cerrando con un incremento del 0.6%.
Este escenario financiero plantea interrogantes sobre el futuro de Nissan y su capacidad para adaptarse a un mercado automotriz en constante evolución. La empresa deberá actuar con rapidez y efectividad para navegar estos desafíos y asegurar su viabilidad a largo plazo.
