Novo Nordisk se encuentra en medio de una transformación importante tras el movimiento de su principal inversor, que busca tomar el control de la junta directiva de la farmacéutica danesa. Este cambio surge con el objetivo de revitalizar las ventas de Wegovy, su exitoso fármaco para la pérdida de peso. El actual presidente, Helge Lund, junto a seis directores independientes, han anunciado su renuncia después de una disputa con la Fundación Novo Nordisk sobre la rapidez de los cambios en la compañía.

Propuesta de nuevos liderazgos

La Fundación Novo Nordisk, que combina la propiedad empresarial con la filantropía, ha propuesto a Lars Rebien Sorensen, ex CEO de la empresa, como nuevo presidente de la junta por un periodo de dos a tres años. Sorensen ha respaldado al actual CEO, Mike Doustdar, quien asumió el cargo en agosto y ha iniciado recortes de personal y un nuevo enfoque en mercados clave.

Desafíos en el mercado estadounidense

A pesar del éxito de Wegovy, que llevó a Novo Nordisk a convertirse en la compañía más valiosa de Europa el año pasado, las acciones de la empresa han caído más del 40% este año. Esto se debe, en parte, a que Eli Lilly ha capturado una porción significativa de mercado. La Fundación ha criticado a la junta saliente por su falta de agilidad para adaptarse a las dinámicas del competitivo mercado estadounidense.

Reestructuración y nuevos miembros

La junta se reunirá para formalizar estas renuncias en una reunión extraordinaria de accionistas programada para el 14 de noviembre. Además de las renuncias, la Fundación ha propuesto seis nuevos miembros para la junta, quienes aportan una vasta experiencia en la industria farmacéutica.

• Seis miembros electos por los accionistas.
• Cuatro miembros electos por los empleados.

Refuerzo de la estrategia en EE.UU.

Sorensen ha enfatizado la necesidad de contar con más representantes que comprendan el mercado estadounidense. “El mercado estadounidense es nuestro pan diario”, declaró. Esta estrategia apunta a mejorar la representación y alineación de la junta con las necesidades del mercado.

Los analistas apuntan a que la Fundación busca una mayor influencia en la compañía para restaurar la confianza de los inversores y mejorar las ventas. A pesar de que el plan de reestructuración de Doustdar ha logrado estabilizar el precio de las acciones, aún quedan desafíos significativos en el competitivo entorno estadounidense.

La reestructuración parece ser un paso clave para que Novo Nordisk recupere su posición en el mercado y vuelva a atraer a los inversores hacia sus acciones, que cerraron con un descenso del 1.5% tras el anuncio de estos cambios.